Logotipo Aeroméxico cómo ha cambiado en 90 años

Antes de adentrarnos sobre el logotipo Aeroméxico, hablemos un poco de su historia que es súper interesante. La aerolínea comenzó en 1934 como Aeronaves de México, y su primer vuelo fue de la Ciudad de México a Acapulco. Lo mejor de todo es que el boleto costaba solo 30 pesos, ¿te imaginas? Y el avión que usaron era un Stinson SR, que para ese entonces era lo último en tecnología.

Al principio, la aerolínea se enfocaba en conectar ciudades dentro de México, pero ya para los años 50, empezaron a volar a Estados Unidos, a lugares como Los Ángeles y Nueva York. Eso les dio mucho prestigio y los puso en el mapa como una aerolínea que conectaba a México con el mundo. Y en los 2000, expandieron sus rutas aún más, llegando a Europa, Asia y otros lugares de América Latina, lo que los consolidó como una aerolínea global.

Hoy por hoy, Aeroméxico sigue siendo una de las aerolíneas más importantes de México, e incluso ha sido reconocida como la más puntual del mundo, lo cual es un gran logro. Pero bueno, lo que nos interesa aquí es hablar sobre el branding, y más específicamente, sobre el logo de la aerolínea. Ha cambiado varias veces a lo largo de los años, y cada versión refleja la evolución de la marca, así que vamos a ver eso más a fondo.

El logotipo de Aeroméxico ha sido un símbolo clave en toda la historia de la aerolínea, y si te pones a pensar, es una de las primeras cosas que te vienen a la mente cuando escuchas el nombre. Es más que solo un logo; es parte de su identidad, y ha ido evolucionando junto con la compañía. A lo largo de estos casi 90 años, ha pasado por varios rediseños que no solo reflejan los cambios dentro de Aeroméxico, sino también lo que estaba pasando en el mundo en cuanto a tendencias de diseño.

Cada versión del logo ha contado una historia, desde la época dorada de la aviación hasta los tiempos modernos, donde todo es más estilizado y minimalista. Así que, si ves los distintos logos que han tenido, también puedes ver cómo ha crecido y cambiado la aerolínea. ¡Vamos a darle un vistazo a esta evolución!

El despegue del águila: Aeroméxico en sus Inicios (1934-1980)

El primer logo de Aeroméxico era súper sencillo, como un sello que mostraba un águila imperial. En esa época, los aviones se marcaban con una sola tinta, así que el logo seguía esa misma línea. El águila simbolizaba poder y grandeza, muy acorde a lo que representaba la aviación en esos años. Aunque el diseño era básico, tenía toda la intención de mostrar que Aeronaves de México (como se llamaba entonces) venía con todo para destacar en el mercado.

En 1953, el logo empezó a tener más estilo. Le agregaron una sombra al texto, algo muy en la onda de los carteles de esos tiempos, y también aparecieron los primeros colores: azul oscuro, rojo y dorado. Luego, en los años 60, se introdujo el concepto del «guerrero águila», que era una figura que simbolizaba orgullo y fortaleza. Este guerrero llevaba casco y plumas, dándole ese toque de vuelo y de tradición mexicana.

Ya para 1972, el logo circular desapareció. Ahora el símbolo del águila iba arriba y el nombre abajo, lo que le daba un aire más moderno. La tipografía también cambió, haciéndose más completa y más acorde a los tiempos. En cuanto a los colores, el rojo pasó a ser un poco más anaranjado, y también se incorporaron el negro y el gris, lo que hacía que el logo se viera más sofisticado y actualizado.

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¿Sabes por qué Aeroméxico eligió la cabeza del guerrero águila para su logo?

Porque representa la valentía y el orgullo de los antiguos Caballeros Águila, y las plumas hacen referencia al vuelo, conectando todo con la aviación y las raíces mexicanas.

Aires de cambio: La modernización en los 80

En los 80, Aeroméxico dio un giro bastante interesante, no solo internamente, sino también en su imagen. Fue en esta época cuando decidieron actualizar su logo. Seguía siendo el águila de siempre, pero con un toque mucho más moderno y abstracto. Todo esto gracias a que se lo encargaron a un diseñador profesional, y vaya que se notó la diferencia. Aquí vemos clarísimo cómo un buen diseñador puede hacer que una marca se vea increíble.

Lo que hicieron fue usar geometría para representar al caballero azteca, destacando la cabeza de águila y las plumas. ¿Y sabes qué? Desaparecieron los colores y dejaron el logo súper simple: fondo naranja y elementos en blanco. Esto ayudó un montón porque lo hacía más fácil de reproducir y le daba una imagen más limpia. Otro detalle interesante es que por fin le pusieron la tilde a “México,” dándole más énfasis a las raíces del español.

Luego, en 1988, le dieron otra renovada al logo, de nuevo con el mismo diseñador, Raúl Pérez Duarte. El resultado fue buenísimo. Le quitaron las plumas y las cambiaron por líneas horizontales, lo que le daba más dinamismo. También metieron esas líneas en la palabra “Aero” para que se diferenciara de “México.” Lo curioso aquí es que volvieron a quitar la tilde de “México,” ¿raro, no?

Al principio, el logo iba a ser todo naranja, pero meses después lo cambiaron al azul oscuro que ya conocemos. Este cambio no fue solo estético, también era una manera de mostrar que Aeroméxico estaba modernizándose, mejorando su flota y apuntando a una expansión internacional.

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Consolidando el vuelo: El rebranding de los 90

En 1998, Aeroméxico lanzó el logo que más tiempo ha durado, ¡ya van 26 años con él! A mediados de los 90, querían darle un empujón a su presencia internacional y, como parte de eso, modernizar su imagen. Lo curioso es que al principio tenían pensado cambiar el logo por completo, pero al final solo le hicieron unos retoques.

El logo se simplificó mucho más, pero manteniendo el águila como siempre. Solo que esta vez, le dieron un toque más estilizado y moderno. La cabeza del águila, por ejemplo, tiene una curva suave que la hace parecerse más al fuselaje de un avión. También le redondearon un poco el rostro, y las líneas de velocidad pasaron de ser rectas a curvas, lo que le dio más dinamismo.

Lo más interesante de este rediseño fue el cambio en la tipografía. Volvieron a las mayúsculas, y las iniciales sobresalen del resto del texto, lo que le da más presencia. Esta nueva tipografía tenía un aire diferente a lo que se veía en otros logos internacionales de la época, y además conectaba mejor con la idea de la cultura ancestral, esa que siempre ha estado presente en el símbolo del caballero águila desde el principio.

Este logo no fue solo un cambio visual, fue parte de una estrategia más grande para que Aeroméxico pudiera competir con las grandes aerolíneas internacionales y seguir siendo el líder en México.

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El futuro despega: El nuevo look de aeroméxico en 2024

En 2024, Aeroméxico cumple 90 años, y para celebrarlo decidieron darle un giro a su logo. Aunque sigue siendo reconocible por el águila, el nuevo diseño es mucho más elegante y moderno. La idea detrás de este cambio es que refleje la apuesta de la aerolínea por la innovación, la sostenibilidad y el mantenerse como un referente tanto en México como a nivel internacional.

Ahora, lo interesante es que, aunque inicialmente querían hacer un cambio más radical en el logo, al final solo hicieron algunos ajustes importantes. El águila se mantiene, pero ahora es más estilizada, con líneas más suaves y redondeadas, dejando atrás las formas rectas y duras. Estas curvas no son solo un capricho de diseño, tienen un propósito: transmitir accesibilidad, amabilidad y cercanía. Básicamente, la nueva imagen busca conectar con más gente, hacer que Aeroméxico se vea más amigable, tal vez incluso atraer a un público más joven. Aunque, claro, algunos creen que este cambio podría hacer que la marca pierda un poco de esa imagen de fuerza y solidez que proyectaba antes.

Otro detalle es el rostro del caballero azteca, que ahora tiene más detalles, lo que lo hace parecer más realista. Ya no es tan geométrico y, curiosamente, eso es lo que algunos piensan que le quita ese aire imponente que tenía el logo anterior. De hecho, algunas críticas dicen que las plumas del águila parecen más una melena, lo que cambia por completo la imagen del guerrero azteca.

Hablando de la tipografía, también hay cambios interesantes. Volvieron a usar mayúsculas, pero ahora las letras tienen un toque personalizado, como unas pequeñas alas en la “A” y la “M”. Sin embargo, lo que ha causado más comentarios es la separación entre las letras de “Aero,” que ha hecho que algunos se pregunten si fue un error o algo intencional. Además, las “O” en “Aeroméxico” son un poco más pequeñas que las otras letras, lo que genera un efecto visual raro que muchos han notado.

En cuanto a los colores, también hay una actualización. El azul principal es ahora más profundo, y el rojo y azul claro fueron sustituidos por un color magenta, lo que le da un toque más moderno y fresco. Es un cambio que busca darle un aire más actual a la marca sin perder esa elegancia que siempre ha tenido.

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Algo que ha generado bastante crítica es que, para hacer este cambio tan grande, Aeroméxico contrató a una agencia de publicidad en lugar de una especializada en branding. Esto ha hecho que algunos se pregunten si fue la mejor decisión. A pesar de eso, el nuevo logo ya se está viendo en los aviones, y hay que admitir que esas líneas horizontales en el diseño le dan un aire de innovación y modernidad.

Este rebranding no es solo un cambio digital (como lo estamos viendo en sus redes sociales y página web), sino que también implica una gran inversión para renovar la imagen en aviones, oficinas y edificios. Sin duda, Aeroméxico está apostando fuerte por esta nueva etapa visual para seguir destacando en la industria aérea.

Before After

Conclusión logotipo Aeromexico

La evolución del logo de Aeroméxico no es solo un recorrido visual, es una muestra clara de cómo la marca ha sabido moverse con los tiempos. Lo interesante aquí no es tanto cada cambio individual, sino lo que cada uno de esos ajustes refleja: una aerolínea que, a lo largo de 90 años, ha buscado mantenerse relevante sin perder de vista sus raíces.

Lo que vemos ahora, con el logo de 2024, es que Aeroméxico está apostando por la innovación y una conexión más cercana con sus clientes, sin olvidar el legado que la ha llevado hasta aquí. Los primeros logos transmitían fuerza, solidez y un sentido de grandeza, mientras que el nuevo diseño parece ir en una dirección más accesible y amigable. Y aunque algunos puedan sentir nostalgia por la imagen imponente del caballero águila, el verdadero valor de Aeroméxico está en su capacidad de adaptarse, evolucionar y seguir siendo un líder en la industria.

Este cambio no se trata solo de estética, sino de lo que la marca quiere proyectar de aquí en adelante. Aeroméxico no solo mira hacia atrás con orgullo por lo que ha logrado, sino que ahora más que nunca, mira hacia el futuro, con un logo que refleja esa visión de modernidad y cercanía, manteniéndose en la cima de la aviación mexicana e internacional.